En diciembre ya supimos quiénes eran nuestros correspondientes y empezamos a chatear con ellos; así, cuando llegaron en febrero, ya nos conocíamos un poco. Aquí hicieron muchas visitas a los lugares más importantes de la zona, además de compartir tiempo en casa con las familias para conocer nuestra cultura desde dentro.
En marzo llegó nuestro turno. Destino: Labenne, un pueblo costero al suroeste de Francia. Fue una semana inolvidable, en la que visitamos ciudades preciosas y también zonas naturales, como la increíble duna de Pyla. Las familias nos acogieron en sus casas con mucho cariño y todos nos sentimos muy a gusto. Creamos lazos fuertes con nuestros correspondientes y también con sus familias.
Por suerte, muchos seguimos manteniendo el contacto, lo que además nos permite practicar el francés de la mejor manera posible.
Personalmente, espero poder reencontrarme algún día con mi amiga francesa :) "Tu me manques"
Los Barruecos - Museo Vostell |
Collège de Labenne |
Biarritz |
Dune de Pyla |
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